Las enfermeras de los distintos puestos de salud y hospitales del estado Portuguesa ya no pueden ni siquiera quejarse. Al hacerlo, son víctimas de hostigamiento y persecución, según denuncias formuladas por la presidenta de ese gremio en Guanare, Silvia Torrealba, quien intervino este lunes en el programa radial La Palestra.
Torrealba recalcó que la situación económica y laboral del personal de enfermería en la entidad es insostenible y no aguanta más silencio. “Tenemos apenas un salario básico de 928. 000 bolívares y algunas bonificaciones por efectos de la convención colectiva que nos elevan los ingresos a solo 2.000.000 de bolívares, un poco menos de 8 dólares al mes”, señaló.
La dirigente gremial, adscrita al Hospital Universitario Dr. Miguel Oraá, se unió al clamor de las enfermeras de Venezuela y solicitó también al Ministerio de Salud el bono de 30 dólares por semana para cada enfermera activa o jubilada. “Exigiremos y no callaremos así persistan las amenazas”.
Respecto del bono de salud por 100 dólares que ofreció el presidente interino Juan Guaidó, la presidenta del colegio de enfermería del estado Portuguesa consideró que este bono está próximo a llegar.
«Se ha tardado un poco porque son recursos que vienen por vía de organismos internacionales y se están diseñando los mecanismos de la billetera para la asignación, de manera que llegue a todos los que se registraron en el programa. Todos los colegios de enfermería del país, incluidos los dos del estado Portuguesa, somos participes de las discusiones de este bono y estamos activos para que cuando llegue el momento de la cobranza no quede nadie por fuera”, explicó.
Al hablar sobre COVID-19, Silvia Torrealba señaló que, a la fecha, el virus está controlado en el estado Portuguesa. La pandemia, gracias a Dios, no ha causado los estragos que ha alcanzado en los estados Miranda Zulia y Distrito Capital, apuntó.
La presidenta de los enfermeros de la zona sur reconoció que los pacientes contagiados, unos 70 según el gobernador Rafael Calles, están recibiendo el tratamiento de acuerdo al protocolo establecido por el Ministerio de Salud. Advirtió que ante cualquier síntoma, un paciente debe rechazar la automedicación y acudir de inmediato a los centros de salud.
Silvia Torrealba también precisó que ninguna persona debe sentir temor de acudir a ningún hospital ni ambulatorio en la región, puesto que no hay riesgo de ser contagiados por COVID-19.
“En los hospitales centinela las áreas destinadas a COVID-19 son aisladas y no tienen comunicación con las áreas de hospitalización ni de emergencias, tanto en el Hospital Miguel Oraá como el Casal Ramos. Los ambulatorios están trabajando hasta las 12 del mediodía y los centinelas trabajan 24 horas con servicios de hospitalización. No debe haber temor, de parte de la población, a requerir sus servicios de salud”.
