La fiscalía de Miami ha incautado o congelado 450 millones de dólares por corrupción o lavado de dinero de venezolanos en Estados Unidos por parte de magnates venezolanos que servían como testaferros. La mayor cantidad incautada estaba a manos de Alejandro Andrade, extesorero de Venezuela durante el gobierno del fallecido presidente Hugo Chávez.
Washington se ha negado a devolver el dinero a Venezuela mientras siga regida por el presidente Nicolás Maduro y se mantiene en una cuenta congelada en el país norteamericano. Se desconoce si en un posible cambio de gobierno, el Estado norteamericano decida repatriar la suma de dinero.
Es importante destacar que la cifra de 450 millones de dólares fue el monto recaudado solo en Miami. Aún no se conocen las cantidades de las otras fiscalías. En Houston y Nueva York se adelantan investigaciones relacionadas que se han ralentizado por la pandemia de Covid-19.
Andrade cumple una sentencia de 10 años de prisión y perdió 6 propiedades, siendo las más relevantes una casa en Pinecrest, una propiedad a orillas de la playa en Palm Beach y una finca en Wellington donde criaba caballos, todo esto valorado en 33 millones de dólares.
El extesorero de la nación se declaró culpable en el caso de corrupción y confirmó haber recibido más de 1.000 millones de dólares solo en sobornos. Andrade entregó un cheque por 250 millones de dólares al gobierno de los Estados Unidos al entregarse a la justicia.
Raúl Gorrín y Francisco Convit también fueron confiscados por el gobierno estadounidense, así como también otra serie de empresarios señalados de estafar a PDVSA y extraer dinero de las arcas públicas a través de empresas de maletín.
El Departamento del Tesoro no ha querido decir el monto exacto que ha confiscado en Estados Unidos por corrupción proveniente de Venezuela y se desconoce qué harán con él.