En respuesta a la introducción de nuevas sanciones estadounidenses contra el sector energético de Irán por, supuestamente, apoyar a «entidades terroristas», el ministro de Petróleo de la nación persa, Biyán Namdar Zangané, declaró este lunes que la industria petrolera de Irán no cederá a la presión de EE.UU.
«La imposición de sanciones a mis colegas y a mí es una reacción pasiva al fracaso de la política de Washington de reducir a cero las exportaciones de petróleo crudo de Irán», tuiteó el alto cargo de la república islámica. «La era del unilateralismo ha terminado en el mundo. La industria petrolera de Irán no se verá paralizada«, aseguró.
Horas antes, el Departamento del Tesoro de EE.UU. anunció otro paquete de sanciones contra Teherán, en esta ocasión contra representantes clave del sector petrolero iraní, por «financiar las actividades desestabilizadoras» de la Fuerza Quds, unidad de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica especializada en guerra no convencional y operaciones de inteligencia militar.
EE.UU. sanciona a varias entidades de Irán
En un comunicado emitido este lunes, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro de EE.UU. ha informado de la inclusión del Ministerio de Petróleo de Irán, la Compañía Nacional Iraní de Petróleo (NIOC, por sus siglas en inglés) y la Compañía Nacional de Petroleros de Irán (NITC, por sus siglas en inglés) en su lista de sanciones, por, según alega, su apoyo financiero a la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) del país persa.
La nueva medida restrictiva del Tesoro estadounidense está dirigida también a varios individuos, incluido el ministro de Petróleo de Irán, Biyan Namdar Zangane.
Entre los sancionados también se encuentran cuatro individuos acusados de haber participado en la venta de gasolina de Irán al Gobierno venezolano del presidente Nicolás Maduro, una transacción que Washington intentó en gran medida de bloquear, pero sin éxito.