El gobernador del estado Zulia, Omar Prieto, fue hospitalizado por tener problemas respiratorios, dijeron a Reuters tres fuentes conocedoras del caso.
Prieto fue internado la noche del martes en una clínica privada cercana a Maracaibo, capital de Zulia, debido a que presentada dificultades para respirar, dijo una de las fuentes que pidió reservar su nombre.
A Prieto le están suministrando tratamiento preventivo y el resultado de una prueba PCR se espera para esta semana, agregó otra de las fuentes consultadas, que también solicitó no ser identificada por temor a represalias.
En su balance diario del miércoles, las autoridades no mencionaron el caso del gobernador. El Ministerio de Información y la gobernación del Zulia no respondieron de inmediato a pedidos de comentarios.
Por otra parte, la periodista Karen Aranguibel (@karanguibel) afirmó que Prieto salió negativo en la prueba rápida, pero que le hacen los «chequeos preventivos lógicos» porque este martes falleció un miembro cercano al círculo del gobernador.
Asimismo, Aranguibel informó que Lisandro Cabello, secretario de Gobierno, se encuentra en cuarentena en su residencia pese a no presentar síntomas, pero es por precaución.
Mientras que el periodista Miguel Ángel Román, residenciado en Chile, aseguró que Prieto tenía COVID-19 pero que habrían pedido «total discreción».
Insistió que su información «es correcta» y que pospusieron el traslado de Prieto para la Amado, pero que será realizada esta madrugada 2:00 de la madrugada. Resaltó que no está grave ni entubado.
No obstante, esto no ha sido confirmado por las autoridades.
En Venezuela se reportan unos 8.010 casos de COVID-19 y 75 fallecidos, según datos oficiales. Pero líderes de la oposición han cuestionado las cifras, señalando falta de transparencia en la notificación de casos y acusando persecuciones a quienes contradicen la información del gobierno.
Zulia ha estado entre los estados más afectados por el virus debido al colapso de los servicios de electricidad y agua, lo que dificulta los esfuerzos para mantener medidas básicas incluso en los centros hospitalarios.
Las autoridades dicen que muchos de los casos se originaron en un mercado de alimentos que abastece a gran parte de la segunda ciudad de Venezuela a pesar de su reputación de hacinamiento y malas condiciones sanitarias.
Maduro señala que Venezuela ha manejado el brote mejor que otras naciones latinoamericanas e insiste en que la mayoría de los casos del país petrolero provienen de migrantes venezolanos que regresan de Colombia y Brasil, un argumento rechazado por grupos médicos especializados.
