A la lista de 56 procesos preliminares en la Comisión de Acusación, más de 10 indagaciones previas en la Corte Suprema de Justicia y una investigación formal en ese alto tribunal.
Se sumó esta semana un nuevo caso en el que aparece mencionado el expresidente y senador Álvaro Uribe Vélez, uno de los políticos más controvertidos de la historia reciente del país.
El miércoles, la Corte Suprema dio a conocer que el 15 de mayo la Sala de Instrucción abrió una investigación preliminar contra Uribe por un correo que recibió en diciembre del año pasado.
En ese anónimo (firmado por Maria Maria) se denunciaba que, supuestamente, Uribe «no solo se benefició con las interceptaciones ilegales del escándalo del hacker».
Refiriéndose a Andrés Fernando Sepúlveda, condenado en el 2018 a 10 años de prisión por espiar a negociadores del procesos de paz.
«Durante este año (2019) varias unidades de inteligencia y contrainteligencia militar se han dedicado a usar sus capacidades para realizar interceptaciones ilegales de comunicaciones»
«Tenían como destinatario de esas acciones al margen de la ley es el señor Uribe Vélez», asegura el correo, que, además, menciona a varios uniformados que supuestamente estarían involucrados.
Este el mismo caso que generó revuelo en el Ejército en enero.
Tras conocerse denuncias sobre supuestas interceptaciones y perfilamientos a periodistas, políticos, opositores del Gobierno, abogados y defensores de derechos humanos.
Esos señalamientos llevaron a que la Fiscalía abriera investigaciones y citara a interrogatorio al excomandante del Ejército, el general en retiro Nicacio Martínez; a que la Procuraduría General llamara a juicio disciplinario a 13 uniformados involucrados.
En ese escenario, la decisión de la Corte sacudió de nuevo la política al poner a Uribe como el supuesto beneficiario de esos seguimientos.
Que revivieron el fantasma de las chuzadas ilegales del DAS, por las cuales hace cinco años fueron condenados funcionarios del gobierno del expresidente, como su secretario, Bernardo Moreno, y la exdirectora del DAS María del Pilar Hurtado.
Así, la nueva investigación preliminar dividió la opinión entre los seguidores y los detractores de Uribe.
Desde el Centro Democrático, su partido, el expresidente recibió apoyo con opiniones como las de Ernesto Macías o Paola Holguín.
En la otra orilla, desde el Polo Democrático, el senador Iván Cepeda dijo que el episodio de las carpetas de inteligencia ilegal en el Ejército “es una fiel copia del DAS”.
Y señaló que “en buena hora” la Corte abrió esta investigación, invitando a Uribe a que “en lugar de atacar y calumniar a ese alto tribunal” se defienda “por las vías legales”.
El mismo miércoles, Uribe aseguró que esta es otra indagación preliminar “por un anónimo cobarde” y dijo que “la Corte, que todo lo filtra, debería explicar por qué hay dos investigaciones” en su contra por el mismo correo.
A través de Jaime Granados, su abogado, la defensa de Uribe cuestionó que se le abrieran dos procesos por el mismo anónimo.
Proceso Preliminar
El hecho de que se trate de un proceso preliminar (es decir, aún no hay una investigación formal contra Uribe por las supuestas interceptaciones).
Es por lo que fuentes de la Corte afirman que el anónimo es completamente válido para iniciar una indagación previa que permita establecer si hay un posible delito y algún tipo de responsabilidad penal.
Para esto, el despacho del magistrado Héctor Alarcón, presidente de la Sala de Instrucción.
Ordenó en un auto realizar inspecciones a la:
- Fiscalía.
- Procuraduría.
- Ejército.
- Ministerio de Defensa
Así, recolectar testimonios para establecer qué tan cierto es lo que dice la denuncia.
Mientras tanto, este nuevo proceso les dio argumentos tanto a los seguidores de Uribe como a los opositores del expresidente en su apoyo o rechazo.
Álvaro Uribe tiene hoy varias denuncias en la Corte por injuria y calumnia.
Pero también procesos preliminares por los audios del ‘Ñeñe’, por supuestos falsos testigos contra Iván Cepeda.
Por el caso del hacker y por las masacres en El Aro, La Granja y San Roque (Antioquia), cometidas por ‘paras’ cuando él era gobernador.
Y solo tiene un proceso en firme: el de supuestas presiones a exparamilitares para que se retractaran de relacionarlo con las Auc.
Ahora la Corte Suprema tendrá que resolver hasta dónde llegaron las supuestas interceptaciones en el Ejército y si realmente Uribe recibió esa información, para determinar si archiva el caso preliminar o si le abre un proceso formal y lo cita a indagatoria.
Información: El Tiempo