Es una elaboración muy recomendada para celebraciones o para cuando se desea deleitar en ocasiones especiales.
Sobre todo, teniendo en cuenta que el salmón es una alternativa muy valorada.
Y la combinación con un salseado dulce lo transforma en un plato sumamente tentador.
Para quienes busquen una alternativa rápida de hacer, fácil y a la vez distinguida, el salmón a la miel no defrauda
Ingredientes
4 lomos de salmón
30 gr de mantequilla
2 cucharadas de miel
Zumo y ralladura de ½ limón
Eneldo fresco
1 cucharada de mostaza de Dijon
Aceite de oliva virgen
2 cucharadas de salsa de soja
Sal y pimienta al gusto
Cómo hacer salmón a la miel
1. En primer lugar, lavar cada filete de salmón y echarle un poco de sal y pimienta.
2. Precalentar el horno a 180° y preparar una fuente con papel para hornear.
3. A continuación, pincelar cada lomo con un poco de miel y ralladura de limón.
Sellar los filetes de pescado en una sartén con un chorro de aceite de oliva con dos minutos por cada lado es suficiente para que se doren, sin cocerlos por completo.
4. Colocar el salmón en la fuente para horno y terminar de cocerlo allí, durante ocho/ diez minutos.
5. Mientras tanto, preparar la salsa de miel.
Para ello, en una cacerola pequeña colocar la mantequilla y derretirla a fuego suave.
Incorporar las cucharadas de miel, la mostaza de Dijón, la salsa de soja, el zumo de limón y una pizca de sal y pimienta.
Remover suavemente y apagar el fuego. Reservar.
6. Una vez que el salmón esté cocido, retirarlo del horno, ponerlo a punto de sal y servir en cada plato un filete.
Bañarlo con una generosa cantidad de salsa de miel y mostaza y decorar con unas hojas de eneldo fresco.
7. Disfrutar recién cocido con el acompañamiento que apetezca, pueden ser unas patatas o ensalada.