Dos adolescentes fueron asesinadas accidentalmente en la cabeza a solo unas horas de distancia en la ciudad de Miami, confirmaron las autoridades.
Michael McGowan, de 17 años, fue arrestado el martes en relación con el tiroteo del lunes por la noche en una eficiencia en la cuadra 2700 de Southwest 20th Street. Se enfrenta a un cargo de homicidio involuntario.
Según su informe de arresto, las autoridades encontraron a dos menores y dos adultos dentro de la casa cuando respondieron a la escena justo antes de las 8:30 p.m.
La policía dijo que la víctima, de quien el Miami Herald informó que tenía 17 años, fue encontrada en el piso en una posición boca abajo con una aparente herida de bala en la cabeza. Fue declarada muerta en la escena.
Una pistola negra y una revista estaban encima de un escritorio cerca de la puerta principal, dijeron las autoridades.
Según el informe del arresto, las cuatro personas dentro de la eficiencia fueron interrogadas por los detectives y McGowan confesó que estaba sosteniendo el arma cuando se disparó accidentalmente, disparando a la víctima en la cabeza.
Todos los testigos corroboraron la declaración de McGowan, dijeron las autoridades.
La policía dijo que Arya Gray, de 15 años, también recibió un disparo en la cabeza esta semana mientras estaba con amigos y su hermana dentro de un apartamento en 7843 NE 10th Ave. en el vecindario Upper East Side de Miami.
La policía de Miami-Dade arrestó a Thalys Gabriel Olivera, de 17 años, de Miami, el miércoles. Se enfrenta a un cargo de homicidio involuntario con un arma mortal.
La policía dijo que descubrió que el arma utilizada en el tiroteo del martes había sido reportada como robada de Homestead el 24 de abril.
Según las autoridades, los testigos dijeron que Olivera «blandía imprudentemente el arma de fuego» mientras estaba dentro del apartamento.
La gente en el departamento le pidió a Olivera que guardara el arma, según la policía, lo que hizo por un corto tiempo.
Los testigos dijeron que poco después, sacó el arma Glock 43 nuevamente, apuntó el arma de fuego a Gray, colocó su dedo en el gatillo y disparó una ronda, golpeando a la víctima en la cabeza.
Olivera le dijo a la policía que estaba jugando con el arma y mientras «jugaba» con ella, apretó el gatillo y vio un destello que golpeó a Gray.
El personal de Miami Fire Rescue llevó a Gray al Centro Ryder de Trauma de Jackson Memorial Hospital Centers, donde más tarde murió.
