El Colegio Imperial de Londres, Reino Unido, determinó que los bebés que recibe lactancia materna en sus primeros meses de vida, ahorran entre 95 y 154 kilos de emisiones de CO2, en comparación a los que tiene una dieta basada en leche de fórmula.
La investigación demostró que la cantidad de agua caliente necesaria para calentar los teteros para dar leche a los infantes, implica un gasto anual de energía equivalente a cargar 200 millones de teléfonos móviles.
Por tal motivo, consideraron que la lactancia materna es una práctica sostenible para el planeta, además de ofrecer otras ventajas desde el punto de vista medioambiental.
“Se trata de un alimento natural y renovable, que no deja huella de carbono en el medioambiente; no requiere envasado, transporte ni combustible para su producción, preparación y consumo, y tampoco produce desechos” dijo Anna Bach Faig, principal investigadora.
Bach Faig consideró que el pecho de la madre es el mejor envase que existe, puesto que es estéril, dosifica la cantidad de alimento que necesita el bebé sin acopladores especiales y tiene la leche siempre en una temperatura óptima.
“Sustituir esto por una leche de fórmula implica el uso de recursos adicionales: por un lado, el empleo de envases procedentes de la propia fórmula infantil, pero también el consumo de agua, el uso de los biberones y las tetinas, los productos para esterilizarlos, los calentadores”, mencionó la especialista.
A pesar de esa realidad, cerca de un 40% de los infantes nacidos cada año son alimentados con leches de fórmulas hasta los seis meses de edad.
Este 2020 fue la cuarta ocasión en la cual los temas de la Semana Mundial de la Lactancia Materna están relacionados con el cuidado del planeta y el medioambiente.
En otras oportunidades, se resaltaron los beneficios de esta práctica para el medioambiente con los lemas: «Lactancia materna un recurso natural» (1997), «Lactancia materna exclusiva los 6 primeros meses: segura, saludable y sostenible» (2004) y «Lactancia materna: clave para el desarrollo sostenible» (2006).
