Pocas ciudades en el mundo emanan tanta espiritualidad como Jerusalén. No en vano la ciudad santa israelí es meta del turismo religioso ya que es el centro neurálgico para las tres religiones monoteístas: judaísmo, cristianismo e islamismo. Fundada por el rey David hace más de 3000 años, en Jerusalén vivió y murió Jesucristo y desde allí, según la religión musulmana, Mahoma ascendió al paraíso.
Ya sea por motivos religiosos o meramente turísticos, Jerusalén y por extensión Israel, se están convirtiendo en uno de los destinos más solicitados de Oriente Próximo ya que sus enclaves espirituales, sobradamente conocidos y que atraen a miles de peregrinos año tras año, son además importantes reclamos turísticos que sus autoridades están sabiendo potenciar para hacer de esta industria otro de los puntales económicos del país.
Que ver en Jerusalén
El muro de los lamentos. Conocido también como pared occidental o Kotel, el muro de los lamentos es el lugar más santo para el Judaísmo. Son millones y millones los visitantes que vienen cada año para rezar en esta pared antigua, que, como se cree, es el último remanente del segundo templo construido por Salomón. Independientemente de su inclinación religiosa, una visita al muro de los lamentos es una experiencia sin igual.
Monte de los Olivos. Siempre recomiendo empezar la visita por Jerusalén con una parada en el Monte de los Olivos. Además de ser un lugar hermoso desde donde contemplar la mejor panorámica de la ciudad, la foto obligada de muchos turistas, es un punto que nos ayuda a orientarnos.
Cúpula de la roca. También conocida como el Domo de la roca, uno de los más preciosos y duraderos tesoros arquitectónicos del mundo, un lugar de culto para el Islam. Igualmente, sean cuales sean tus creencias religiosas, contemplar esta obra es una experiencia inolvidable. Es importante tener en cuenta que la Cúpula está abierta a no musulmanes durante solo unas horas en la semana, lo que se debe verificar antes de la visita.
La iglesia del Santo Sepulcro. Esta iglesia ha sido el sitio de peregrinación más importante para el cristianismo durante siglos, lo que la convierte en una visita obligada para los cristianos y amantes del arte y la historia. Se cree que está ubicada en la posición de la crucifixión, el entierro y la resurrección de Cristo, uno de los sitios más santos que podrías conocer en el mundo. Aparte de su importancia espiritual, su interior está cubierto por mosaicos impresionantes.
El viejo bazar de la ciudad. A medio camino entre la Iglesia del Santo Sepulcro, El muro de los lamentos y la Cúpula de la roca encontramos el viejo bazar, uno de los mejores sitios en todo Israel para comprar recuerdos auténticos del viaje.
El museo de Israel. Catalogada como la institución cultural más grande del país. Fácilmente te podrías gastar el día completo explorando la impresionante colección de este museo, pues cuenta con una extensa colección de arte y artefactos tanto antiguos como modernos, tanto Israelí como internacional.
La Ciudad Vieja de Jerusalén. Todos los lugares sagrados mencionados se ubican en la llamada Ciudad Vieja de Jerusalén, un laberinto de callejuelas estrecas y milenarias dividido en cuatro barrios: el judío, el cristiano, el musulmán y el armenio.
Museo del holocausto. Más conocido como el Yad Vashem es un museo creado a la memoria de los millones de judíos que fallecieron durante la segunda guerra mundial. Expone arte, historia, biblioteca, sitios conmemorativos y mucho más. Es el segundo lugar más visitado en todo Israel después del muro de los lamentos.
Cultura moderna y vida nocturna. Toma un respiro de toda la historia y religión que te ofrece la ciudad y sal a la vieja ciudad de Jerusalén para experimentarla como lo hacen los locales. Deléitate tomando un café, vete de compras, relájate con un narguile o ve a bailar en alguno de los muchos clubs nocturnos.
Mercado Mahane Yehuda. Un gran mercado al aire libre en la ciudad, un lugar turístico por excelencia. Acá podrás encontrar comida, lindas cafeterías y pequeñas tiendas de moda que hacen de este lugar, un sitio maravilloso para caminar y conocer.
Vía Dolorosa: un recorrido sagrado. La pasión de Jesús fue justo a través de estas calles, por donde discurre la llamada Vía Dolorosa, las catorce estaciones por donde el condenado pasó con la cruz a cuestas y a la que hoy los cristianos dedican sus rezos en el Vía Crucis.
Gastronomía
Uno de los mejores motivos para visitar Jerusalén es experimentar su asombrosa gastronomía. El paisaje culinario está compuesto por las cocinas de los inmigrantes que han hecho de Jerusalén su casa. Pruebe un falafel o una shawarma para que experimente la comida callejera o tome un asiento en alguno de sus exquisitos restaurantes.
Cómo llegar a Jerusalén
- En avión. El aeropuerto internacional Ben Gurion (TLV) está cerca de la ciudad de Lod, en la autopista 1, a 52 kilómetros de tu destino. Es reconocido como uno de los más seguros del mundo, por lo que pasarás mucho tiempo en sus controles.
- En tren. Llegarás a la estación de trenes de Jerusalén Malha (en el barrio de Malha) usando trenes nacionales que la conectan con Tel Aviv y otras ciudades del norte. Salen cada hora, hasta las 20:00 horas, aunque esta frecuencia se reduce los fines de semana. Estos trayectos son recordados por sus paisajes, no tanto por su velocidad.
- En coche. Cualquier extranjero puede conducir en Israel si tiene carné de conducir en su país de origen. Jerusalén está conectada a las principales autopistas, incluidas las 60, 50 y 1.
- En autobús. Estos vehículos son un recurso popular y rápido para entrar y salir de Jerusalén. Los autobuses gestionados por Cooperativa Egged conectan todo Israel. Sus viajeros se desplazan hasta Tel Aviv en una hora. La mayoría llegan a la estación central de autobuses, ubicada en Jaffa Road.