Con más de 230 mil casos de Covid-19 confirmados y 27.371 muertes, los números rojos de España hablan por sí solos, por eso Ángela Merkel, canciller de Alemania, expresó su total desacuerdo con la gestión sanitaria que ha llevado Pedro Sánchez y por eso ha quedado excluida de la lista de países con los que Alemania compartirá la apertura del sector turismo.
El ministro de Interior de Alemania, Horst Seehofer, de acuerdo con ABC, informó sobre el levantamiento del confinamiento en las fronteras para volver a abrirlas este fin de semana, específicamente en Luxemburgo y Dinamarca. En el caso de Francia, Austria y Suiza, los viajeros deberán esperar hasta el 15 de junio porque, insiste el representante del gobierno alemán “detrás de estos países hay territorios muy afectados, como España e Italia (…) Es una decisión importante que los tres gobiernos hayan estado de acuerdo en una relajación fronteriza, pero con estos otros países sería demasiado temprano. Ellos mantendrán sus respectivos controles fronterizos y nosotros mantendremos las restricciones en las conexiones aéreas con Italia y con España”.
El gobierno alemán niega incluso la posibilidad de que sus ciudadanos realicen viajes a territorio español: “En estos momentos no puede decirse a largo plazo cuándo se podrán ir eliminando gradualmente las restricciones a la libertad de movimiento”, declararon. El turismo es una fuente de ingresos importante para estos países y estando tan cerca del verano, el momento en el que más viajeros se desplazan por el continente, la situación de incertidumbre y temor hace ver que la pérdida de ingresos por este rubro será escandalosa. Para el gobierno de Pedro Sánchez, la congelación del sector y la negación de otros países a ingresar en sus fronteras por riesgo de contagio significaría una pérdida de 13 mil millones de euros, un golpe duro para la economía del país europeo.