Cerca de 2.000 personas se han manifestado este sábado contra el racismo en las ciudades alemanas de Stuttgart y Hamburgo, en una marcha que se produce tras la muerte del afroamericano George Floyd en Estados Unidos en una detención policial el pasado 25 de mayo.
Una mujer de 24 años se dirigió a los manifestantes en Stuttgart al asegurar que era de raza negra y había nacido en Alemania, pero que siempre tenía que justificarse, en unas marchas que han estado marcadas por los discursos que piden más respeto y justicia para estos ciudadanos.
Un portavoz ha confirmado que la protesta se ha desarrollado de forma pacífica. Además, desde la Policía alemana han indicado que los organizadores pidieron en numerosas ocasiones a los participantes que mantuvieran las distancias de seguridad para frenar posibles contagios de coronavirus.
En Hamburgo, se han congregado alrededor de 250 personas contra el racismo, si bien los organizadores han señalado que esperaban que el número de asistentes alcanzara los 750. Las autoridades policiales habían informado de la convocatoria de una segunda marcha durante el sábado, si bien finalmente fue suspendida poco antes de comenzar.
La muerte de Floyd ha desencadenado las mayores protestas de la historia reciente de Estados Unidos contra la brutalidad policial en toda la nación y ha originado también manifestaciones a lo largo de diferentes países de todo el mundo.
Según datos de la Policía nacional, solo en Berlín el movimiento “Unteilbar”, congregó a unas 8.000 personas, aunque los organizadores hablaron de 20.000 asistentes.
Con mascarillas y estrictas medidas de seguridad, los presentes formaron una cadena humana de nueve kilómetros, desde la Puerta de Brandeburgo, hasta el barrio de Neukölln.
El alcalde de Berlín, Michael Müller (SPD), expresó antes de la manifestación que es importante pronunciarse, pero hay que tener presente el problema que supone el coronavirus. En declaraciones a Tagesspiegel, sostuvo que “por supuesto que debemos seguir luchando contra el racismo, la exclusión y la discriminación, pero los fines de semana, y también en las semanas siguientes, tenemos que ser considerados con los demás y tomar medidas”.