El Cabello de Ángel, un ingrediente único para hacer dulces o bien rellenar pasteles, tartas y todos aquellos postres de repostería que te puedas imaginar. Su nombre se debe a las hebras que forma la pulpa de la fruta que asemejan a hebras de cabello dorados, es un dulce almibarado pero su sabor y textura es única y deliciosa.
Ingredientes
- 1 calabaza o auyama (Cidra)
- Azúcar blanco
- 1 limón
Preparación
- Abrimos la calabaza o auyama. Su piel es muy dura así que deberás emplearte bien.
- Cuando la tengamos abierta introducimos los trozos en el horno, durante diez minutos a 150º, para facilitarnos la tarea a la hora de desprender la carne de la auyama de su corteza.
- Una vez tengamos la carne limpia sin la cascara (aunque con las pipas), colocamos en una cazuela con un poco de agua. Tapamos y cocemos a fuego lento hasta que tengamos la pulpa de la auyama blanda.
- Dejamos templar, escurrimos, quitamos las pipas y, apretando la pulpa con las manos limpias, desmigamos cada trozo sacando las hebras de la auyama.
- Cuando tengamos toda la pulpa lista y escurrida, pesamos.
- Colocamos en una cazuela junto con el azúcar (la mitad del peso de la pulpa de la cidra), la piel del limón y su zumo.
- Ponemos la cazuela a fuego bajo-medio y removemos de vez en cuando, hasta que se caramelice la pulpa de la auyama, más o menos media hora aproximadamente.
- Retiramos del fuego y ya tendremos el Cabello de Ángel para utilizarlo en cualquier elaboración.