En los Presupuestos Generales del Estado para 2021 Pedro Sánchez «ha cruzado ya una línea negra», la de «pactar con Bildu». Es la conclusión a la que ha llegado el presidente del PP, Pablo Casado, para quien hay un agravante: «Hacerlo, además, a cambio de acercar presos con delitos de sangre cerca de las cárceles del País Vasco».
Para el líder de la oposición, no puede ser que EH Bildu «sea quien mande para el futuro de la legislatura», cuando es un partido que «ha dicho que quiere venir a Madrid a romper definitivamente el régimen y que todo acaba de empezar». Así lo ha asegurado el presidente de los populares, este viernes, en un vídeo grabado tras reunirse con el Gremio de Restauración en Barcelona
Casado concluye que esta deriva se debe al papel protagónico del líder de Podemos y vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, en la estrategia del Gobierno de coalición. «El PSOE cada vez está más influido por Podemos. Podemos se está comiendo al PSOE y es quien manda en el Gobierno». Y si no, ha dicho, «¿por qué el PSOE está diciendo que es una buena noticia para la democracia que los que no han condenado 850 asesinatos ahora sean sus socios prioritarios?».
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CASADO APELA A LOS ‘BARONES’ SOCIALISTAS
Esta impresión suya «es algo que la cuarta economía del euro no se puede permitir», ha asegurado. «No hay ni un solo ministro tan radical como Iglesias en Europa, ni un Gobierno con un socio tan extremista», ha juzgado el líder de los populares, quien ha apelado a los barones moderados del PSOE como Javier Lambán (Aragón), Emiliano García-Page (Castilla-La Mancha) o Guillermo Fernández Vara (Extremadura), a los que Sánchez debería hacer más «caso», a su entender.
«La recuperación de la economía, la defensa de la constitución y la dignidad histórica de España no pueden depender de Podemos», ha continuado su alegato de alerta ante el creciente peso de Iglesias.
«El PSOE se tiene que respetar a sí mismo y tiene que romper con los radicales que intentan blanquear la historia de Bildu, que dependen de los independentistas y que nos llevan a unos Presupuestos ruinosos», ha zanjado Casado.
De vuelta a los asuntos que le ocupaban en su visita a la Ciudad Condal, Casado ha mostrado el apoyo del PP al sector de la restauración en Cataluña, que está viviendo «unos momentos trágicos con una caída absoluta de toda la hostelería» y que ha afectado también al turismo, «el sector más pujante para España y el escaparate internacional».
EL «INFIERNO FISCAL» DE SÁNCHEZ
El PP demanda medidas urgentes: «Más liquidez, más créditos ICO y una carencia de un año para pagar los ya concedidos; que los ERTE se extiendan hasta después del estado de alarma y una reducción de impuestos como está haciendo Europa».
Para Casado, Sánchez quiere un «infierno fiscal» con una subida de 9.000 millones de euros en impuestos a las clases medias y trabajadoras. «Ahora hay que bajar impuestos y ayudar a la gente a llegar a fin de mes», ha sostenido.
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Con información de El Mundo.
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